Capítulo 3: Siguiendo el rastro
Álvaro se acomodó en la acera, a una distancia prudente, con la vista fija en Javier Medina. El hombre caminaba con un ritmo relajado, como si el mundo girara a su alrededor sin importarle lo más mínimo. “Qué confiado, cabrón”, pensó Álvaro, encendiendo un cigarrillo mientras mantenía una distancia segura. No había prisa; las primeras … Leer más